Por: Chileokulto
No me puedo quedar en casa.
Una de las peticiones del gobierno, es que la ciudadanía se queda en casa para minimizar contagios y disminuir la pandemia, pero resulta que mucha gente trabaja y vive del sueldo que su empleador le paga.
Es muy difícil creer que una persona va a llegar a algún acuerdo con el empleador, y pedirle que le cancele su sueldo íntegro, por esos dias que está en su casa en un confinamiento que el estado obliga debido a pandemia que afecta a todo el mundo.
Cuesta entender que el gobierno pida quedarse en casa cuando sabemos que muchas empresas juegan con los salarios utilizando el sueldo minimo como base e inflan el sueldo líquido con asignaciones como locomocion, colación y bonos varios con tal de solo imponer por el sueldo mínimo.
Una familia con un hijo por ejemplo, ¿cómo puede vivir en esa incertidumbre economica?, es muy facil subirse al automóvil fiscal, que funciona con combustible que lo paga el estado, llegar a la oficina y ser atendido con jugo de naranja pagado por el estado, reunirse en “almuerzos de trabajo” pagado por el estado y lanzar una orden de confinamiento.
Hay que ser muy “care palo” y falta de empatía con la demás gente, sabiendo que deberán arreglárselas como puedan, hace unos días se solicitó algún tipo de “adelanto” de nuestros ahorros que están capturados en las AFPs, se pedia el 10% para que se pueda respetar la cuarentena, pero no, esos dineros son intocables según el estado.
La gente está preocupada, está con rabia e incertidumbre, él gobierno no piensa que ese estado de angustia en cualquier momento no soportará la presión y la gente hará lo que sea para sobrevivir.
Sabemos que el presidente de la república no es empatico, porqué al ver su prontuario economico y penal, nos damos cuenta que es un antisocial.
No nos pidan tranquilidad y depositar confianza en ustedes señores políticos, el verdadero virus es la insolencia al tratarnos, como simples cifras economicas, donde solo les preocupa la estadistica, sin pensar que hay una madre, un hijo o un padre, que despierta sin tener claro lo que vendrá… Hoy en Chile se siente y se ve mas puro el aire por la cuarentena, pero las brizas del miedo nos cruzan también.
